La Fiscalía se Santa Fe investiga las causas de muerte de una beba que nació mediante un parto domiciliario. Su madre llevó, este viernes por la madrugada, el cuerpo de la recién nacida en una caja al Hospital José María Cullen y en otra la placenta, y alegó que había tenido a la criatura en el baño de una casa quinta en Desvío Arijón, y que había sufrido fuertes golpes al caerse tras dar a luz.
Luego de ser recibida en la guardia, la mujer fue trasladada al servicio de Ginecología y Obstetricia, donde se constató que estaba en un estado de posparto inmediato. El viernes por la mañana, el director del hospital, Juan Pablo Poletti, tomó conocimiento del hecho y, tras una reunión con los médicos que habían atendido a la chica y a la bebé, se decidió realizar la denuncia en la Seccional 4ta por no tener certezas sobre las circunstancias del hecho.
Según las primeras pericias, se habrían constatado dos fracturas y múltiples contusiones en el cuerpo de la bebé de 3 kilos, que nació producto de un embarazo a término de 36 semanas. La mujer, que no se había sometido a controles médicos durante su embarazo, quedó internada.